El teletrabajo no es algo que surgió recientemente con la declaración de pandemia a causa del COVID-19, esta forma de trabajo empezó hace muchos años atrás cuando el internet empezó a estar disponible a nivel mundial. Debido a la globalización, muchas organizaciones usan esta forma de trabajo para empleados que viajan constantemente, que por temas familiares o de movilidad no pueden ir a la oficina, entre muchas otras razones. Por ello las grandes empresas de tecnología vienen desarrollando y perfeccionando las herramientas tecnológicas que habilitan al teletrabajo desde hace muchos años atrás.
En este sentido una de estas grandes empresas de tecnología, específicamente VMware ha desarrollado una nueva forma de facilitar el teletrabajo mediante lo que ellos denominan como “digital workspace” o “espacio de trabajo digital”. El espacio de trabajo digital de VMware en términos generales es una plataforma empresarial con la que las áreas de Tecnologías de la Información (TI) suministran a los colaboradores de la organización de todas las aplicaciones, programas, sistemas y herramientas tecnológicas que ellos necesitan para hacer su trabajo de forma eficiente y remota, sin importar l o los dispositivos que están usando, y todo esto haciéndolo de forma segura protegiendo la integridad de la información corporativa.
Esta plataforma facilita el acceso mediante un inicio de sesión único a un catálogo de distintas aplicaciones, programas, sistemas y herramientas; ya sean estas de correo electrónico, calendario, archivos y colaboración social. El usuario final tiene la libertad de elegir sus propios dispositivos o aprovechar los dispositivos que le entrega la organización, mientras que el área de TI tiene la capacidad de hacer cumplir las políticas de seguridad.
Ahora bien, considerando la coyuntura en la que nos encontramos, hemos visto que muchas organizaciones ecuatorianas, ante la necesidad de seguir operando, estas han improvisado implementando esquemas emergentes de teletrabajo apoyándose en soluciones gratuitas y redes privadas de comunicación (VPN), las cuales son bastante limitadas y que generan a su vez graves problemas y riesgos en cuanto a seguridad e integridad de la información, entre muchos otros.
A esto se suman otros retos e inconvenientes que se deben mitigar mediante el uso de tecnologías especializadas para este tipo de modalidad de trabajo.
Es importante que las organizaciones ecuatorianas sigan operando a la mayor capacidad posible a pesar de estar en modalidad de teletrabajo, pero para ello además de cambiar los paradigmas culturales, se deben implementar nuevas tecnologías que permitan y faciliten la productividad dentro de un ambiente seguro y controlado desde el punto de visto del manejo de información corporativa.
Para esto es necesario desplegar tecnologías especializadas y probadas en otros países para temas de movilidad y teletrabajo; reduciendo al máximo los riesgos del esquema tradicional y a su vez ofreciendo las prestaciones necesarias para una mayor productividad
En conclusión, las organizaciones ecuatorianas deben facilitar el trabajo de sus colaboradores que se encuentran trabajando de forma remota desde sus casas, poniendo a su disposición todas las herramientas necesarias para realizar sus labores de forma eficiente, productiva y segura; pero siempre cuidando uno de los activos más importantes que tienen las empresas, que es la información.
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